jueves, 13 de enero de 2011

Recuerdos de España en Mexico: Hernán Cortés (2º parte)



En el viaje desde Veracruz hacia el interior no existían prácticamente caminos... así que Cortés y sus hombres adelantaron lo que muchos siglos mas tarde dijo tan bellamente Machado..."Caminante no hay camino...se hace camino al andar"...

Algunos de los puntos por los que pasaron están claros, pues incluso se han conservado los nombres de los pueblos que aparecen en las crónicas (aunque ya no estén en el mismo emplazamiento) ...pero otros lugares no son tan seguros...


Desde Veracruz, La Antigua y Quiahuixtlan (zona inferior) hasta Coatepec, Xalapa y Xico, al pie del Cofre de Perote y el Pico de Orizaba ( arriba a la izquierda) y Naolinco a la derecha. Pinchar para ampliar

Por ejemplo también se cree que pasaron por el bellísimo pueblo de Naolinco, donde ahora un mirador nos muestra el gran panorama que seguramente contemplaron asombrados y sorprendidos.

 

pues aquí el paisaje y los olores del campo les recordó tanto a España que empezaron a llamar a esta tierra, tan esplendorosa, Nueva España...

Al fondo de este gran mirador y al pie del llamado Cofre de Perote se extiende la bella ciudad de Xalapa (capital administrativa del Estado de Veracruz) que posee un extraordinario Museo Antropológico donde pueden admirarse las enormes cabezas olmecas y las deliciosas caritas sonrientes...y en cuyo término se alza el volcán más grande de América, el Orizaba.
 

Tierra de orquídeas y cafetales, de bosques de niebla...


Magnífico Jardín Botánico Clavijero en la antigua carretera Xalapa-Coatepec


El historiador Hugh Thomas en su gran libro La conquista de México nos cuenta:
"La distancia entre Cempoallan y México-Tenochtitlan, a vuelo de pájaro es de cuatrocientos kilómetros. El camino varía mucho. La primera etapa es plana, caliente, tropical, húmeda y fértil; y en el siglo XVI, con abundancia de bosques, si bien salpicada de cultivados campos de maíz. Más allá de Jalapa el terreno asciende de repente a mil ochocientos metros y el clima se vuelve templado en un región coronada por dos montañas, Nauhcampatepetl (actualmente conocida con Cofre de Perote) de más de cuatro mil metros de altitud, y Citlatepetl (ahora Monte Orizaba), de más de cinco mil cuatrocientos metros de altitud.

La siguiente etapa cubre una desolada llanura, en esa época dominada por un lago salino y una tercera montaña, Matlalcueye (actualmente Malinche) que se eleva a unos cuatro mil quinientos metros. Entre esa llanura y la ciudad de Tenochtitlan se encuentra una cordillera, de cuyas montañas los volcanes Popocatepetl (el nombre significa "Montaña que humea"), de casi cinco mil cuatrocientos metros de altitud, e Iztaccihuatl ("Mujer blanca") de poco más de cinco mil metros, se vislumbran a muchos kilómetros de distancia. El paso entre ambos volcanes se eleva a poco menos de cuatro mil metros y el terreno desciende hacia el gran lago de Tenochtitlsan, a una altitud de dos mil doscientos metros"

 Esquema de la ruta de Cortés desde Cuba (pinchar para ampliar)

Muy cerca de Xalapa (a 19 Km.) se encuentra Xico, un encantador pueblo
Con preciosas vistas sobre el Orizaba


donde podemos leer el recuerdo del paso de Cortés por su suelo...

Nota. Tanto de Xico como de Xalapa hay otra entrada en el blog bajo el nombre de "Xalapa"

y desde aquí, si seguimos el relato de Hugh Thomas, se enfrentó al paso entre los dos grandes volcanes gigantes...

Por el conocido como Paso de Cortés





Y que hoy es Parque Nacional



En el Museo de Bellas Artes de México D.F.


Fotografía tomada desde el mirador de la Torre Latinoamericana; aproximadamente a 140 m de altura
en su teatro, existe un telón corta-fuegos único en el mundo, hecho de acero y zinc, con un revestimiento de cristal opalescente y un peso aproximado de 22 toneladas, es como un gigantesco puzzle de casi un millón de piezas de cristales (cada tesela mide dos cm.) de colores que forman el paisaje que forman estos dos majestuosos volcanes. Lo realizaron en la casa Tiffany de Nueva York.

Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons.




3 comentarios:

Anónimo dijo...

Parece mentira la cantidad de cosas que puedes contar en tan poco espacio y acompañadas de fotos tan oportunas...Creo que ya te he dicho alguna vez que me parece muy buena esta idea de los recuerdos recíprocos de los dos países. Enhorabuena. Donan

Mercedes dijo...

Hola María Rosa, impresionante este viaje en dos jornadas al que nos has invitado, muchas gracias. ¡Por un rato hemos podido ir a México guiados por tí! Las fotos, preciosas.

Anónimo dijo...

Pues sí, Mariarosa, como en todas las rutas que nos ofreces, fruto de tus infatigables viajes, dan ganas de salir corriendo (en este caso volando) para ir a conocerlo. Claro que sin olvidar aquello de que los viajes son los lugares, es cierto, pero lo son en buena medida las personas con las que se realizan.
Avellaneda