Ayer por la tarde, ya entrado el otoño, Madrid nos seguía ofreciendo un cielo luminoso y una temperatura que invitaba al paseo y a la admiración de tantas perspectivas y de tantos edificios bellos como tiene la ciudad... Un encanto de tarde.
La ruta que seguí partía de la Plaza Benavente y atravesaba la Plaza Mayor, siempre animada, para salir a la calle Mayor e ir al número 86 a visitar una exposición "esplendorosa" dentro del Palacio que fue de Abrantes y que hoy es el Instituto Italiano de Cultura...
NO conseguí verla porque el horario es de las 10 h a las 18...y daban las seis campanadas cuando llegué...Pero descubrí otro, por mi ignorado, en el que si pude entrar: el antiguo Palacio de Cañete, parte del cual es ahora la Casa de Sefarad-Israel.
Creo que no voy a extenderme en explicaciones (que se merecen todas) de estos dos magníficos edificios ni de sus historias tan interesantes ...Este post sólo va a ser una crónica rápida y fotográfica de un breve recorrido por la calle Mayor en "Una tarde otoño llena del sol de Madrid" como decía una preciosa canción...
La exposición en el antiguo Palacio de Abrantes se dedica al esplendor del Renacimiento desde la perspectiva de las ricas telas (y toda la labor artesanal y artística que conllevaban) con que se confeccionaban los espléndidos vestidos de las damas de las nobilísimas familias... Para ser tan bella es pena que sea tan breve pues acaba de empezar y termina el ya inmediato 30 de este més...por eso es una recomendación de urgencia para que procuremos verla.
Antes de llegar a su puerta y unirme al grupo de desolados visitantes que no pudimos entrar me había fijado en otro letrero anunciador de otra exposición...
así que retrocedí hasta el número 69 y entré en el Palacio de Cañete...Me vino enseguida a la memoria un artículo leido hace unos meses donde hablaban de una truculenta leyenda basada en un asesinato entre sus muros a mediados del XVII que conmocionó al Madrid de la época y cuyos efectos "paranormales" han seguido alimentando esas leyendas que toda ciudad que se precie debe tener...
Nada más atravesar el umbral de la severa fachada, propicia sin duda a las leyendas... se deshace el "encanto" pues todo es absolutamente moderno, blanco, de paneles de cristal y cantos metálicos... La Casa Sefarad-Israel ocupa la primera planta y el sótano, donde está la exposición y allí sí, alli se han conservado algunas bóvedas de ladrillo visto...
EN contraste con la vitalidad de la calle aquí todo era silencio y blancura...Vi y disfruté la exposición en absoluta soledad
A la salida bordee el enorme edifcio y contemplé el jardín posterior que da a la calle Madrid, a la calle Traviesa y a la del Sacramento...
Antes tenía todo él una tapia pero ahora han puesto, en esta calle, una reja moderna que permite su contemplación...
Una vez más Madrid me emociona.
4 comentarios:
Una vez más, gracias por el regalo de tus visitas, hecho de forma tan atractiva.
Avellaneda
Hoy se me ha adelantado Avellaneda... precioso paseo María Rosa.
Comprendo tu emoción porque a mí a veces me ocurre lo mismo.
Gracias a tu consejo, hoy he entrado a ver la exposición en el Palacio de Abrantes, un paseo por el ambiente renacentista para no perderse. Una buena noticia: ha tenido tanto éxito que la han prorrogado hasta el 16 de octubre.
Otro día iré a conocer el Palacio de Cañete.
Desde luego confirmas la creencia de muchos: Madrid nunca deja de sorprendernos.
Jo, que paseo más increíble,más de otoño.
¿Madrid, ciudad de palacios? Es otra perspectiva.
Me encanta esos paseos que propones y que demuestran cómo Madrid es una ciudad inabarcable y llena de sorpresas...
Besos
Hildy
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