martes, 3 de noviembre de 2020

 Jaén, tantas cosas para ver (y 3)

     Los Baños Árabes

 

En los sótanos de este Palacio de Villardompardo nos encontramos con otra inesperada sorpresa...450 m² dedicados a unos Baños Árabes construídos nada más iniciarse el siglo XI, quizás aprovechando unos baños romanos, pero quedaron enterrados y ocultos cuando, a finales del XVI, don Fernando de Torres y Portugal,  I Conde de Villardompardo y VII Virrey del Perú, edificó su Palacio sobre ellos.

Este ocultamiento total entre los cimientos y los sótanos del Palacio benefició a los Baños pues los protegió hasta que, en los inicios del siglo XX Enrique Romero de Torres (Córdoba 1876-1956), hermano del famoso Julio Romero de Torres, descubrió parte de los Baños durante la realización del Catálogo Histórico-Artístico Monumental de Jaén.

Cuatro años más tarde el equipo arqueológico de Manuel Gómez-Moreno (Granada 1834-1918) propuso que el edificio se declarase Monumento Nacional, hecho que se produjo en 1931. Pero hasta 1936 no se inicia su restauración, en la que intervinieros los arquitectos Leopoldo Torres Balbás y Luis Berges Martínez.

La Guerra Civil interrumpió todo el proceso que no pudo volver a iniciarse hasta 1970 y que llevó a cabo el arquitecto Luis Berges Roldán y que finalizó en 1984.

La Asociación Europa Nostra otorgó la Medalla de Honor de ese año a la restauración de los Baños Árabes de Jaén.

 Baños Árabes de Jaén - Wikipedia, la enciclopedia libre

Fotografía obtenida en Wikipedia.org

El Parador de Santa Catalina

Si una imagen vale más que cien palabras (¿o son mil?) esta fotografía del castillo de Santa Catalina demuestra bien su poderío desde su imponente altura dominadora. 

Y no nos extraña que le dieran el título de Guarda y Defendimiento de los Reinos de Castilla por su condición fronteriza. La primitiva fortaleza califal  es del siglo IX, y fue modificada a mediados del XIII por Alfonso X el Sabio después de que su padre, Fernando III el Santo conquistara la ciudad el 25 de noviembre festividad  de Santa Catalina de Alejandría, nombrada por ello Patrona de la ciudad que todos los años celebra su fiesta religiosa, seguida de una romería en el Cerro de Santa Catalina, a cuyos pies se extiende Jaén.

Dividió Alfonso X la enorme fortaleza en dos recintos y entre ambos levantó una fuerte muralla y una imponente torre del Homenaje. Pero tras la conquista de Granada el lugar perdió su importancia militar e inició una lenta y larga decadencia hasta que fue restaurado en 1956 y se instaló el suntuoso Parador en 1965.

 
Y no hay castillo que se precie que no tenga su fantasma... y aquí dicen que, al anochecer, una triste dama rubia se asoma por las almenas del castillo mirando a la ciudad y con una vihuela canta una antigua canción...

 Tres morillas me enamoran

en Jaén

Aixa, Fátima y Marién.

Tres morillas tan garridas

iban a coger olivas

y hallábanlas cogidas 

en Jaén: 

Aixa, Fátima y Marién.

 

Un bello lugar para acudir cuando la pandemia pase y podamos volver a viajar sin prisas.





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