viernes, 30 de diciembre de 2016

La Navidad en el Arte




El arte a través del tiempo ha recreado cada uno de los episodios de la Navidad narrados por los Evangelios, tanto los canónicos como los apócrifos, con toda su gran capacidad de transmisión. El teatro, la poesía, la música, la escultura, la pintura, han fijado, en nuestra memoria colectiva, los dos principales misterios del inicio del cristianismo: la Encarnación y el Nacimiento de Jesús pero también, y en torno a ellos, y con gran riqueza de detalles: el anuncio a los pastores,  la llegada de los Reyes de Oriente siguiendo una estrella y su Adoración al Niño.
Y una de estas manifestaciones artísticas, creada en el siglo XIII, orgullo del arte español, que aúna la poesía con la música y con la difícil técnica de la miniatura son las Cantigas de Santa María,  escritas por el rey Alfonso X, llamado el Sabio, a las que puso música para ser cantadas y a las que anónimos y exquisitos pintores iluminaron con miniaturas, cumpliendo lo que  500 años a.d.C., Simónides de Ceos definió como que la poesía es pintura que habla y la pintura es poesía muda

En la primera mitad del siglo IV empezó a  rememorarse en Roma, con el papa Julio I y a ruegos del Obispo San Cirilo de Jerusalén,  la efeméride del Nacimiento de Jesús, a la que atribuyeron en principio la fecha del 6 de enero, si bien pronto se cambió a la del 25 de diciembre,
que era entonces el primero del año, coincidente con el solsticio de invierno. En  realidad, se desconoce totalmente el año y el día del mes, ya que los Evangelios, única fuente de conocimiento sobre el tema, no lo mencionan. 


 La fiesta del Nacimiento de Jesús, con todo su misterio y ternura, fue calando entre los cristianos y despertó la imaginación de  clérigos y fieles de forma que, en torno al siglo X, se empezaron a hacer respetuosas representaciones de algunos de sus episodios en el interior del templo, como el anuncio a los pastores o la llegada de los Reyes Magos. Cuando las representaciones se ampliaron e hicieron más bulliciosas, por la mayor intervención de pastores y gentes del pueblo, se trasladaron a los atrios, hasta que el papa Inocencio III (1198-1216) las prohibió. 



Representación de un Belén viviente en el pueblo de Villalbilla, Navidad 2016
 Algo más adelante, en 1223, san Francisco de Asís, solicitó autorización al papa Honorio III, para que le permitiera "ambientar" la Misa de la Navidad, poniendo junto al altar un pesebre vacío con un buey y una mula. Esta idea tuvo una gran repercusión y, a partir de ella, la representación del Misterio empezó a extenderse, tanto con actores reales como con figuras de diversos materiales,  antecedentes de los Belenes o Nacimientos que han llegado hasta nuestros días, como muestra de piedad pero también de valioso arte popular.



Esta obritas teatrales representadas en el ciclo de la Navidad, dieron origen a los conocidos como Autos de Navidad, de los que se conserva, en la biblioteca de la catedral de Toledo, un fragmento  del conocido como Auto de los Reyes Magos, como el más antiguo ejemplo de la literatura dramática en castellano de mediados del siglo XII  y se le considera uno de los monumentos del teatro medieval europeo.
   Presentación del Auto de Los Reyes Magos por la Compañía "Nao d´amores"
 
Ya en el siglo XIII uno de los códices más preciados de toda la obra de Alfonso X el Sabio durante su largo reinado (1252-1284) son Las Cantigas de Santa María, en las que el Rey demuestra una religión profundamente humanizada, más dirigida al corazón y a la sensibilidad que al rigor del dogma, más en línea con los franciscanos que con los dominicos (instauradores de la Inquisición en este mismo siglo XIII). 



Utilizó el gallego-portugués y no el castellano, como era habitual en él  o el latín que era la lengua culta. Parece que quiso utilizar la lengua de sus sentimientos, la que aprendió de niño, cuando pasó su infancia en casa de su ayo García Fernández en tierras de Ourense, por lo que este idioma era para él un vehículo de comunicación más emotivo. El gallego y el castellano eran los idiomas más importantes de su extenso reino. En cuanto a la letra utilizada en los códices es uno de los más bello modelos de letra gótica libraria del siglo XIII y constituye un modelo único en Europa. 



La música es la esencia de las Cantigas que tienen, como objetivo, enseñar algo que será  expresado de forma musical. En realidad son Canciones con su correspondiente notación musical, hechas para ser cantadas. La gran originalidad de las Cantigas reside en que se pueden contemplar, leer y escuchar a la vez, como si se tratase de una grandiosa cantata escénica.



Esta miniatura contiene las escenas claves de la Navidad: La Anunciación del Arcángel Gabriel a María, el Nacimiento de Jesús, la Anunciación a los Pastores y la Adoración de los Reyes Magos. 

Reflejó muy bien el pintor el contraste entre las escenas de la Anunciación del Ángel a los pastores y la Adoración de los Reyes. La de los pastores (sólo hay dos según la tradición bizantina) es casi la única que sucede en plena naturaleza, al aire libre. En cambio, en la de la Adoración de los Reyes, el “pesebre” se ha convertido casi en un palacio, con la Virgen sentada en una especie de trono, sobre un escabel de tres peldaños, que la sitúan por encima de los Reyes. Y así queda claro que al Niño acudieron a reverenciarlo primero los humildes y sencillos poseedores de una fe simple y después, llegados de muy lejos, los sabios y poderosos, que apoyaban la fe en razonamientos y en el estudio de las profecías. 
 Las miniaturas fueron pintadas por varios expertos en este arte, con minio y oro y en los colores que más abundan: verdes, carmines, violetas, bermellones y sienas.  



La Cantiga LXXX muestra un confortable interior donde en un gran lecho, Ana acaba de dar a luz a María que es atendida por diligentes parteras. En acusado contraste, el recuadro contiguo nos enseña el nacimiento de Jesús, en una gruta... La forma del pesebre presenta clara e inusualmente la misma forma de los arcos que evocan al acueducto de Segovia y que aparece en otra Cantiga a propósito del milagro de la virgen de la Fuencisla en esa ciudad. Quizá el pintor buscaba  transmitirnos que, al igual que el acueducto conduce el agua, el recién nacido era el verdadero manantial  del agua de la Gracia...

Cuenta la leyenda que una joven judía llamada Esther que tenía la intención de dejar el judaísmo y convertirse al cristianismo.fue condenada a ser arrojada al vacío desde lo alto de las rocas de Las Peñas Grajeras, pero invocó a la virgen de la Fuencisla y llegó al suelo sana y salva... En memoria de este hecho Alfonso X "el Sabio" dedicó la cantiga CVII a este milagro. Segovia nombró a la Fuencisla Patrona de la ciudad. y a finales del s. XVI se construyó un magnifico santuario al pie de esas peñas.
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En los mosaicos bizantinos de la iglesia de san Apolinar el Nuevo, en Ravena, del siglo VI, aparecieron los nombres: Melchor, Gaspar y Baltasar, los tres blancos, y los obsequios que portaban: el oro, el incienso y la mirra. Fue siglos más tarde cuando empieza a aparecer un rey negro: Baltasar. La supuesta aparición de los restos de los tres Reyes en la catedral de Colonia, en ese mismo siglo XII,  incrementó mucho su devoción.

Otra “protagonista” en las miniaturas que nos ocupan es la “Estrella de Belén”, claramente mencionada en el Evangelio. Respecto a este fenómeno celeste, hay quien lo niega totalmente, mientras que otros astrólogos lo identifican con una conjunción de planetas, un cometa o una nova, pues está probado que, más o menos por la época en que se cree fue el Nacimiento, sucedieron ciertos fenómenos astronómicos notables que pudieron decidir la larga marcha de los Magos, probablemente, grandes astrónomos. Alfonso X, "rey estrellero y hombre de camino”,  tenía una especial predilección por los Reyes Magos de Oriente.


Y yo deseo que os traigan, a todos los lectores, lo que más deseéis para el año 2017 que vamos a iniciar...y que podamos seguir compartiendo viajes tranquilos por España...y por México


Bibliografía

- Cantigas de Santa María. Edición facsímil de El Códice de las Cantigas de Alfonso X el Sabio. Ms T.I.1 de la Biblioteca de El Escorial. Madrid, Edilán, 1979. 

- El Códice Rico de las Cantigas de Alfonso X el Sabio,  volumen complementario, del anterior, de  igual formato, con 412 páginas conteniendo cuatro estudios sobre el códice: un análisis histórico-codicológico, por Matilde López Serrano; la trascripción del texto y un estudio filológico y literario, por J. Filgueira Valverde; el arte de las miniaturas y su valor arqueológico, por J. Guerrero Lovillo; y un análisis musicológico de las Cantigas, por José María Llorens.

- Cantigas de Santa María, ed. de METTMANN, W. Madrid, Castalia 1984

- Cantigas de Santa María, Códice Rico de El Escorial, ed. de FILGUEIRA VALVERDE, Madrid, Castalia (Col. Odres nuevos) 1985

- Cantigas de Santa María, ed. del MARQUÉS DE VALMAR Y Ribera J., Madrid, Real Academia Española-Caja Madrid 1991

- ARBETETA MIRA, L. Oro, Incienso y mirra. Los belenes en España, Madrid 2000

- BELTRÁN, L., Las Cantigas de loor de Alfonso X el Sabio, Madrid, Júcar 1990

- LÓPEZ ELUM, P., Interpretando la música medieval. Las Cantigas de Santa María, Universidad de Valencia 2005



Nota.- Este texto es un extracto del  trabajo que presenté, en el 2009, en el Simposium convocado por la Universidad Maria Cristina de  Estudios Superiores del Escorial, sobre el tema general de "La Natividad: Arte, religiosidad y tradiciones populares" (pp.433 a 448)

 Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons


martes, 20 de diciembre de 2016

Las Médulas, Patrimonio de la Humanidad




Las Médulas son consideradas desde 1997, como Patrimonio de la Humanidad en base a:
El genio creativo humano, el intercambio de valores, el testimonio de tradición popular y la importancia en la historia de la Humanidad.
 Las Médulas son un punto clave - junto al lago de Carucedo y el valle de Corullón - de la pródiga y hermosa comarca leonesa, cercada por altas montañas, que es el Bierzo.



A unos 25 Km. de Ponferrada camino de Orense, una vez pasado el pueblo de Carucedo con su romántico y legendario lago, un desvío nos conduce a un lugar totalmente excepcional. Desde el Mirador, situado en el pueblo de  Orellán, los ojos descubrirán asombrados, en toda su extensión, un paisaje de tierras convulsionadas y rojizas que a nada se parecen. Son las Médulas. Este fue el lugar elegido por los romanos a finales del siglo I de nuestra Era para, durante casi doscientos años, extraer miles de kilos de oro,  con destino al mantenimiento de su dilatado Imperio.


El procedimiento utilizado para esta grandiosa obra por los ingenieros romanos - leemos en publicaciones de la Junta de Castilla y León - fue el denominado “ruina montium” (ruina de los montes), consistente en introducir grandes cantidades de agua, por una estudiada red de galerías previamente labrada en el interior de la montaña, con el ingente esfuerzo de miles de esclavos (sesenta mil según el acreditado testimonio de Plinio el Viejo, en su  libro de Historia Natural del año 70 d.d.C.), muchos de los cuales encontraron aquí la muerte. Aunque en este punto, de si eran esclavos u hombres libres, no todos los autores coinciden; siendo lo más probable que hubiese gran número de ambos,


El agua, que procedía de multitud de riachuelos nacidos en los Montes Aquilianos y en la sierra del Teleno, era conducida por medio de canales, a veces excavados en la roca, a la parte superior de la explotación donde se contenía en grandes estanques para ser bruscamente liberada. Al pasar por las galerías provocaba enormes y estruendosos derrumbes, arrastrando así las tierras auríferas hasta los lavaderos, donde tenía lugar la recogida del oro. 


Luego, el mágico metal seguía dos rutas: la Vía Augusta, que comunicaba Astorga con Tarragona, donde se embarcaba rumbo a Roma, o la Vía de la Plata, que se dirigía a Mérida, alcanzando el mar después de una travesía por el Guadiana.

Al abandonarse la explotación minera, una vez que los romanos agotaron totalmente el oro, se fue cubriendo la zona por los castaños  y los robles, y el paisaje adquirió, a través de los siglos, el sobrecogedor e inolvidable aspecto actual.


Abandonada la explotación en el siglo III, regresó la vegetación autóctona: robles, escobas, encinas y carrascas. A la vez se expandió el cultivo del castaño, del que hoy pueden verse numerosos ejemplares en el parque, creandose  un entorno espectacular 
Es importante contactar con la Fundación de las Médulas
 para poder organizar bien la visita a tan especial lugar.

 Las mejores descripciones del paisaje berciano, las hizo, a juicio nada menos que de Azorín, un escritor hoy olvidado llamado Enrique Gil de Carrasco en su novela “El señor de Bembibre” en 1884. 


El ya mencionado Lago de Carucedo tiene un origen artificial, ya que fue construído para evitar que el río Sil se obstruyera con las enormes cantidades de arcilla arrastradas desde la explotación aurífera... pero, una vez más, la leyenda embellece la más árida realidad y la leyenda en este caso cuenta que el lago se formó con las lágrimas derramadas por una joven enamorada, sin esperanza, durante largos años del general romano Tito Carisio... Y, cuenta también que la noche de San Juan ella vuelve a la superficie del lago en busca de su amado, mientras peina sus largos cabellos y canta una melancólica canción.


Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons

viernes, 16 de diciembre de 2016

Rubielos de Mora

Rubielos de Mora ha sido nombrado como el pueblo más bello y bueno de España en la Navidad de 2016.

 


Felicito a los habitantes de Rubielos de Mora por este merecido premio que les ha sido otorgado. Cuando lo visitamos hace unos años, nos causó una gran impresión y  más tarde lo incluí en una serie de post dedicados a Teruel

Teruel es una encantadora ciudad (Patrimonio de la Humanidad por su sorprendente y maravilloso mudéjar, en 1986) y los pueblos de su provincia son muy bellos pero no muy conocidos.

A continuación unas fotografías de  Rubielos de Mora que figuran en el post mencionado más arriba, con su correspondiente texto.

Ojalá que Montse Redón, la encantadora guía que nos enseñó todo el pueblo, esté disfrutando de este reconocimiento a su pueblo al que tanto quería...








jueves, 8 de diciembre de 2016

Las Fallas de Valencia Patrimonio Inmaterial

Inexplicablemente, por uno de esos misterios misteriosos que los duendes que habitan en los ordenadores de vez en cuando provocan, ha desaparecido el post que hace unos días, el 2 concretamente de este mes, publiqué con la buena nueva de que la fiesta de las Fallas de Valencia ha sido reconocida como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO...


Lo escribí con todo cariño y por eso voy a intentar reescribirlo desde el recuerdo.

Lista del Patrimonio Oral e Inmaterial de la Humanidad

 Decía que desde el año 2001 empezó a elaborarse, por parte de la Unesco, una lista representativa del patrimonio oral e inmaterial de la humanidad, con el fin de que ninguna de sus manifestaciones se pierda o se olvide.

Merece la pena recorrer estas listas y admirar la inmensa variedad de manifestaciones culturales que existen por el ancho mundo, ver las que han sido ya destacadas y las que quedan por estudiar, y recrearse en lo que significaría poder conocerlas todas en vivo y en directo. Pero, puestos a conformarnos con algo menos inabarcable, conocer bien, al menos, las que han merecido ser declaradas en España.

 - El Misterio de Elche
 - El Consejo de Hombres Buenos de Murcia
- El Tribunal de las Aguas de Valencia 
- El Patum de Berga
- El silbo gomero de Canarias 
- El flamenco  
- El Castell de Cataluña y de Baleares  
- Los patios de Córdoba en Andalucía
- La dieta mediterránea junto a Marruecos, Grecia e Italia
- La cetrería fue reconocida en 2010, en una candidatura multinacional de Arabia Saudita, Bélgica, República Checa, Corea del Sur, Emiratos Árabes Unidos, España, Francia, Marruecos, Mongolia, Catar y Siria. El 6 de diciembre de 2012 se unieron a esta candidatura Austria y Hungría.
- El Canto de la Sibila en Baleares 

- La fiesta de Nuestra Señora de la Salud, de Algemesí.


Y, este año 2016 se ha elegido:

La fiesta de las  Fallas de Valencia
  
La fiesta que empezó a mediados del siglo XVIII, como una simple diversión vecinal, para festejar a San José el Santo Patrón de los carpinteros, se ha convertido en una de las fiestas más universales de España.

En ella se une el gozo de que sea la calle el ámbito principal de la fiesta, y de que el eje de la misma sea el más artesanal ingenio al servicio de una satírica crítica social, y de que todo esté arropado por un mundo de tradiciones y costumbres que la convierten en la fiesta más  valenciana y esperada durante todo el año. 

 En 1885 un periódico local inició la idea de dar premios a las Fallas más  ingeniosas y esta medida estimuló la creatividad y la técnica de forma notable, de forma que el Ayuntamiento con muy buen acuerdo los institucionalizó.

Poco a poco las Fallas fueron cambiando, no su esencia, pero sí su formato, que pasó de ser similar a un teatrito en el que los muñecos (ninots) se alzaban sobre un pequeño estrado, a ser un conjunto imponente, fácilmente visible desde la lejanía y en el que todo es monumental y espléndidamente barroco.

Los Ninots salvados

Por los años veinte empezaron a oírse voces pidiendo que algo, algún ninot al menos, fuera "salvado" del fuego que consumía totalmente aquellas obras de tanta imaginación y habilidad... No fue en un principio muy bien acogida la sugerencia, pero en 1934 el Ayuntamiento convocó un "concurso de ideas" para introducir nuevos festejos en la llamada Semana Fallera y por iniciativa del muy respetado artista fallero Regino Más, se aprobó la propuesta titulada "L´indult del foc" , por la cual y mediante un escrutinio plenamente popular, cada año se salva un ninot o grupo de ellos, bien por su valor artístico, gracia, o ternura que inspire. Todos los Ninots "indultados" se guardan en el llamado Museo Fallero, un lugar que no hay que dejar de visitar para penetrar un poco en el alma de esta fiesta única.

Ninot indultado en 1980. Artista: Julián Puche. "Trio de jubilados pasando por la cuerda floja de su pobre pensión"

 El traje de valenciana

Entre los primeros Ninots salvados de las llamas, justo en el año 1935, se encuentra una pareja típica valenciana que reproduce el rico traje de la mujer, uno de los más suntuosos y artísticos  de nuestro folklore. 

 
Valencia 4 de marzo de 2005. Trajes de Falleras, Foto de Jesús Ciscar. En Memoria gráfica de la historia y la sociedad españolas del s. XX. tomo 19. El País, La mirada del tiempo.

Curiosamente en The Hispanic Society of América de New York , allí donde el millonario Archar Milton Huntington (1870-1955) quiso perpetuar  los personajes, los paisajes, la vida de los pueblos y de las ciudades de nuestra península, José María López Mezquita pintó en 1929 un cuadro titulado Mujeres de Burjasot (localidad valenciana conocida por sus más de cuarenta silos árabes), en la que pueden admirarse las joyas y adornos que éstas solían ponerse para las fiestas... y que hoy siguen admirando a cuantos las contemplan.

Mujeres de Burjasot, de López Mézquita, 1929

Son primordialmente "L´agulla" para sujetar el pelo en forma de moño, las "Arracades" o pendientes (los más característicos llevan perlas en forma de racimo de uva) la "Joya" que se ajusta al cuello por medio de cintas y que, en principio, siempre era una Cruz y la "Pinta" o Peineta, la pieza más preciada, cincelada en latón o plata sobredorada.

Fotografia de Jesús Ciscar, en la misma publicación

Los carteles anunciadores

Otra faceta artística añadida a la Fiesta, es la de los Carteles anunciadores de las Fallas. A partir del año 1929 se organiza un concurso para elegir el mejor cartel y a él han concurrido los más acreditados cartelistas  e ilustradores, consiguiendo un variado y alegre mosaico de los más variados estilos, desde el cubismo, al pop, al art decó o al abstracto. 

Uno de los más famosos es el conocido como "el del farol" obra de Rafael Raga Montesinos

También pueden contemplarse todos los premiados en el Museo Fallero, así como las fotografías de las Fallas ganadoras de cada año.


Nota.-

El 9 de Febrero se inaugura la Exposición de los Ninots en los sótanos del Mercado de La Ruzafa, y el 15 de Marzo se clausura con la elección del "indultado". A las 12 de la noche de ese mismo día se hace la "Plantá" de todas las Fallas

El Museo Fallero se ubica en el antiguo convento de Padres Paules, junto a la Iglesia de Monteolivete. Plaza de Monteolivete nº 4 (frente a la ciudad de las Artes y las Ciencias)

Espero que este post no desaparezca. y copio los mensajes que hasta ahora se han producido


Blogger María Ignacia dijo...
Me fascinan tus reportajes, Mariarosa. Saltas con una agilidad creativa de Castilla, Pedraza, al reino de Valencia: de la piedra al fuego. ¡Piedra castellana y nit del foc mediterránea!
La alusión al cartelismo, me encanta ¿Por qué no nos subes algunos de las fallas?
Precioso que incluyas los nombres de las joyas femeninas: les arracades, la agulla...Esto es apertura lingüística.

Valencia es una ciudad muy bonita que ha dado un cambiazo magistral en las últimas décadsa. Me gusta mucho el libro de Carmen Alborch, ministra socialista de Cultura en los 90, sobre su ciudad natal, donde refiere la anécdota de un ninot-fallera mayor como promoción y publicidad a su candidatura para presidenta de la Comunidad Valenciana. Mi felicitación sincera. Mariarosa, y muchas gracias por tenernos al día.
2 de diciembre de 2016, 22:57
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Blogger MariaRosa dijo...
Hola María Ignacia, eso que me dices de saltar de la piedra al fuego, me ha fascinado a mí también... Valencia es una luminosa ciudad a la que he ido hace tiempo en muchas ocasiones, pero de la que no tengo demasiadas fotos, mejor dicho, fotos que merezcan la pena pues hace muchos años, además de que hacían muchas menos, pues siempre había que ir vigilando que no se terminara "el carrete", no concebias hacer fotos sin el consabido grupo familiar o de amigos delante... He intentado efectivamente poner de algún cartel dando su prodencia naturalmente pero están muy protegidos y no he podido o no he sabido...Pero pueden verse en Internet y son preciosos.
Desconozco ese libro de Carmen Alborch, pero siempre es bonito leer lo que escribe alguien sobre su ciudad o pueblo natal. Lo buscaré.
3 de diciembre de 2016, 10:51
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Anónimo Anónimo dijo...
Muy actual y muy informativo esta crónica sobre el Patrimonio Inmaterial y las Fallas. Eres fant´stica. Muchas gracias. Manolo
3 de diciembre de 2016, 12:43
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Blogger María Ignacia dijo...
MaríaRosa: El libro se llama, La ciudad y la vida (ya no pongo comillas, porque entonces no sale el título, je,je); es de RBALIBROS y del año 2009, quizás esté en La Casa del Libro de Madrid. Da mucha información sobre Valencia, su universidad, sus calles del casco histórico y el plan de modernización y ajardinamiento. También surgen personajes que vigorizaron la cultura y es muy fácil de leer: tiene una prosa muy natural. A mí me encantó, fue un hallazgo de mis revoloteos por las librerías de viejo. Soy muy feliz con estas excursiones librescas. Carmen Alborch tiene otros libros interesantes: uno es, Malas (dedicado por ella) y otro, Solas.
Espero que disfrutes alguno. Y si no los encuentras, te los presto.
3 de diciembre de 2016, 15:19
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lunes, 5 de diciembre de 2016

La Lonja de Valencia




La Sala de contratación de la Lonja de los Mercaderes o de la Seda en Valencia
ver el blog

La Lonja de Valencia. Patrimonio de la Humanidad desde 1996

 Además de los cuatro Patrimonios Inmateriales que la Unesco ha concedido a la Comunidad Valenciana: El Misterio de Elche, El tribunal de las Aguas, Las Fiesta de Nuestra Señora de la Salud en Algemesí y el recientísimo de Las Fallas, esta Comunidad también posee otros importantes Patrimonios de la Humanidad: como el Palmeral de Elche, el Arte rupestre del arco mediterráneo de la Península Ibérica y el edificio de La Lonja de los Mercaderes o de la Seda, que le fue concedido en 1996 por las siguientes razones: