Carmina, muy eficiente, nos busca, tras diligente búsqueda, alojamiento en el próximo pueblo de Tornos, en el Hostal Las Grullas… así que hacía él nos dirigimos y quedamos encantados; está dentro del pueblo, en una curva que hace la carretera, en una especie de media plaza con un enorme y precioso peirón en el centro y es un edificio nuevo de alegre fachada, con una hermosa iglesia al lado… Las habitaciones acogedoras, limpias y claras… ¡esto es un buen empiece!
Así que dejamos los equipajes y nos vamos rápido a ver la laguna desde uno de los lugares donde dicen que mejor se contempla entera, las ruinas del castillo del Berrueco…
Metemos los coches por una senda en plan de todoterreno y por deducción, no por señalización, lo dejamos en determinado sitio y nos lanzamos hacia las ruinas monte arriba…La aventura tiene su recompensa pues efectivamente la vista es extraordinaria y la puesta de sol fascinante…
Al bajar una hermosa luna llena se pasea entre las ramas de los almendros en flor…
1 comentario:
Para terminar la grata lectura de esta segunda parte, nada mejor que un bello y gráfico poema:
"Al bajar, una hermosa luna llena se pasea entre las ramas de los almendros en flor…"
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